Coloidales

Las texturas coloidales o colomorfas son típicamente micro a criptocristalinas y se interpretan como el resultado de la consolidación de un gel (Figs. 43.04.a-.h). Aunque los componentes tienden a estabilizarse aumentando su tamaño de grano por crecimiento cristalino, se caracterizan en general por su granulometría muy fina, a menudo sub-microscópica, lo que puede dar la impresión de un material amorfo. Pueden exhibir un fino bandeado y llamativas morfologías coloformes, fibroso-radiadas, arriñonadas, botrioidales (Tabla 42), etc. O bien presentar un aspecto masivo, indiferenciado, aun comprendiendo varias fases minerales, como ocurre en la limonita: un agregado de partículas submicroscópicas de goethita, lepidocrocita, jarosita, ópalo, hematites, etc. que con frecuencia no llegan a individualizarse por escapar al poder de resolución del microscopio óptico.